Alcantarilla acoge el acto conmemorativo del Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo

organizado por la Delegación de Murcia, de la AVT

En la tarde de ayer, 11 de marzo, Alcantarilla fue la ciudad elegida por la Asociación Víctimas del Terrorismo, en la Región de Murcia, para llevar a cabo el acto conmemorativo del Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo, en el que asistieron algunas de las víctimas que viven en nuestra localidad, junto a la también alcantarillera y delegada en la Región de Murcia de la AVT, Remedios Miñano, el alcalde de Alcantarilla, Joaquín Buendía y varios miembros de la Corporación Municipal, la consejera de Presidencia del Gobierno de la Región, María Dolores Pagán y la secretaria general de dicha Consejería, María Robles, junto a representantes de varias instituciones civiles y militares de Alcantarilla, entre los que se encontraban representación de los Veteranos Paracaidistas del Ejército del Aire.

La Delegada de la AVT, Remedios Miñano, intervino y dio lectura del Manifiesto que la Asociación había realizado, teniendo en cuenta que Alcantarilla era una de las once ciudades que en toda España se realizaba, a través de la AVT. A continuación los sones del Himno de España interpretado por la Agrupación Musical "Virgen de Gracia" de Villareal (Castellón), para pasar a la puesta de una corona de laurel en recuerdo a las víctimas, se guardó un minuto de silencio y con la trompeta del director de la Banda de Cornetas y Tambores "Centuriones de San Pedro" de Alcantarilla, realizar el Toque de Oración y pasar a las intervenciones del alcalde de Alcantarilla, Joaquín Buendía y de la consejera de Presidencia, María Dolores Pagán.

La Unión Europea dedica el 11 de marzo al recuerdo de las víctimas de ataques terroristas, a sus familias y amigos. El 11 de marzo es precisamente la fecha en la que tuvo lugar el atentado en Madrid que acabó con la vida de 191 personas y provocó 1800 heridos. El de Madrid, junto con el de Londres el 7 de julio de 2005 en el que murieron 50 ciudadanos, han sido los ataques terroristas más graves perpetrados en la Unión Europea.

Ayer la Asociación de Víctimas del Terrorismo también celebró, a nivel nacional el acto de conmemoración del Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo, organizado por la misma, en el elBosque del Recuerdo del Parque del Retiro de Madrid. La Región de Murcia también se sumó a ella y lo realizó en Alcantarilla, junto a otras diez ciudades más en toda España.

Para el alcalde de Alcantarilla, Joaquín Buendía, "la voz y la memoria de las víctimas son las mejores armas para luchar contra el terrorismo. Los terroristas quieren nuestro silencio, para que así la sociedad olvide sus horribles acciones y asesinatos; pero si seguimos recordando lo que hicieron, les obligamos a aceptar su culpa. Sólo de esta forma se hará justicia con las víctimas, que es lo que ellas quieren realmente".

"Lamento que sólo estemos preocupados por el terrorismo cuando tenemos la amenaza muy cerca. Lo más importante es la prevención. El hecho de mantener seguros y defender las vidas de nuestros ciudadanos se ha considerado en alguna ocasión como un ataque a sus libertades, y yo creo que es todo lo contrario: el principal derecho humano es el derecho a la vivir y por tanto se tiene que proteger siempre".

En Alcantarilla tenemos a cuatro víctimas del terrorismo, en concreto a José Miñano Miñano, por entonces sargento de la Policía Nacional, en el año 1982, cuando el domingo 31 de octubre, caía herido junto a otros nueve compañeros del cuerpo en el atentado perpetrado en Vitoria -y que costó la vida al policía nacional Francisco González Ruiz. Ayer se encontraba en su silla de ruedas y pudimos contar con el compañero, el agente de la Policía Nacional que prestó la primera ayuda, el también murciano Alfonso Cánovas.

La relación la continúa Antonio Frutos, Guardia Civil herido en el atentado de la Casa Cuartel de Zaragoza 11 de diciembre de 1987, junto a su esposa Carmen Ortuño. Montserrat Morales Almarcha, viuda del Policía Nacional Rafael Leyva Loro, asesinado por ETA el 13 de enero de 1995, en Bilbao (Vizcaya), dejando a seis hijos huérfanos. Y Margarita Poyo Nicolás, que sufrió un atentado de ETA en Amorebieta (Vizcaya).

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