La concejala no adscrita e independiente del Ayuntamiento de Alcantarilla, Lara Hernández, ha valorado positivamente la aprobación por unanimidad de sus dos mociones presentadas para el último pleno municipal que lograron el respaldo de todos los grupos: la rehabilitación de la Plaza del Olmo y la celebración de una fiesta homenaje a los bares y DJs que marcaron la vida cultural de Alcantarilla en los años 80, 90 y primeros 2000.
"A veces, también es posible el consenso cuando solo se mira por el interés general y se dejan a un lado las rencillas políticas o los egos de los que gobiernan", ha señalado Hernández, que ha subrayado la importancia de que estos acuerdos "no se queden en un gesto, sino que se traduzcan en hechos".
En el caso de la Plaza del Olmo, la concejala ha recordado que se trata de un espacio muy querido por el barrio y por el conjunto del municipio, que necesita una actuación de mejora y puesta en valor.
"La Plaza del Olmo no es solo un espacio físico, es un lugar de encuentro, de vida cotidiana y de identidad de barrio. Su rehabilitación es una cuestión de dignidad urbana y de cuidado de lo común", ha afirmado, mostrando su deseo de que el acuerdo aprobado "se ejecute en breve y no quede en un cajón".
Respecto a la moción cultural, Hernández ha querido dejar claro que no se trata de una propuesta superficial ni nostálgica, sino de un reconocimiento institucional a una etapa muy concreta de la historia reciente de Alcantarilla.
"La cultura no es solo lo que cuelga de un museo o aparece en un libro de texto. La cultura también es la música, los espacios donde se compartió y la memoria colectiva de toda una generación", ha defendido.
La edil ha recordado que durante los años 80, 90 y primeros 2000, Alcantarilla fue un referente cultural y musical en toda la Región de Murcia, atrayendo a miles de personas de fuera y construyendo identidad propia.
"Eso también es patrimonio. Y cuidarlo también es responsabilidad institucional", ha afirmado, subrayando que "la música es cultura y los DJs son creadores culturales, igual que lo son los músicos, técnicos, programadores o artistas".
Hernández ha insistido en que esta propuesta no resta espacio ni recursos a otras políticas, ni pretende ser excluyente: "Una ciudad puede y debe atender a lo social y a lo económico, pero también a lo cultural. Esta moción no pide grandes inversiones, pide reconocer, sumar y dar espacio a una generación que hoy no se siente reflejada en la programación festiva".
La concejala ha concluido destacando el valor de ambas aprobaciones: "Cuidar la memoria reciente también es cuidar Alcantarilla. Y cuando se cuida lo común, el consenso no solo es posible, es necesario".